Los expertos resuelven dudas sobre el reciclaje

Representantes de ECOEMBES, ECOVIDRIO, AREMA y GEDESMA protagonizaron una mesa redonda- dentro del marco de las VI Jornadas de Medio Ambiente- en la que respondieron a las principales incógnitas a la hora de separar sus residuosViernes, 10 de Octubre de 2008 Según

Según Alberto Fernández de Santamaría, Gestor de Entidades Locales de Ecoembes, cada año la empresa encuentra dentro de los contenedores amarillos 22.500 toneladas de papel, 8.000 toneladas de ropa y 7.000 toneladas de vidrio. Aproximadamente el 25 por ciento de lo que depositamos en este contenedor no son plásticos, latas ni ‘bricks’-, lo que equivaldría a 4.560 camiones con más de 36 millones de toneladas de materiales no adecuados.
Y otro tanto ocurre en los contenedores verdes, los destinados al vidrio, en los que se depositan alrededor de un 2,7 por ciento de materiales “impropios”. Detrás de tantas toneladas de errores se encuentra, según Fernández de Santamaría, un “exceso de celo ambiental” por parte de los ciudadanos, aliado con la falta de información sobre el uso de los contenedores.

Para muestra un botón: Según Ecoembes, el 50 por ciento de los madrileños está convencido de que existe un contenedor de residuos orgánicos que en realidad es el cubo de la basura al que va el “residuo resto” es decir todo aquello que no pasa el proceso de selección. Otro ejemplo, la ropa tampoco tiene recipiente propio y debe ser depositada en un punto limpio.

Los errores y la dejadez tienen, muchas veces, graves consecuencias. Félix Reneses, director de Operaciones de Ecovidrio, explicó que las porcelanas y vajillas mal depositadas pueden ser muy perjudiciales. A pesar de ello, las cifras de reciclado en los últimos años permiten ser optimistas. Ignacio Hernández de Salamanca, secretario del Consejo de Arema, aseguró que el 63,9 por ciento del papel usado se consigue recuperar. En 2007 se batió un record, recuperando 4,9 millones de toneladas, “un ahorro de espacio en vertedero equivalente a 50 grandes estadios de fútbol”y de los vertederos se obtiene el gas con el que se obtiene energía para una población de 60.000 y 70.000 personas.
A pesar de las campañas, según reconoció, los madrileños siguen utilizando los volquetes callejeros para deshacerse de todo lo sobrante en los domicilios lo que obliga a gastar más, ralentizar el proceso y recuperar menos.